En los carros viejos se debe ajustar el mecanismo para recuperar el gasto del disco. Los carros modernos son autoajustables y el embrague, también conocido con el nombre de clutch, no se gradúa.
Cuando hay que calibrarlo, se debe procurar que quede arrancando lo más cerca posible del piso, es decir, bien al fondo del recorrido del pedal, para que los cambios entren fácilmente. Si queda arrancando muy afuera o arriba, se precipita la situación de ‘patinado’.
Por otra parte, cuando el sistema es hidráulico, el servicio consiste en controlar el nivel del líquido, como en los frenos, y entender que apenas falta éste, es porque hay una fuga que se debe corregir de inmediato





